El tiempo no corre sino vuela

Ya estamos en nuestro sprint final del primer curso y el tiempo me ha volado.

Parece que fue ayer cuando llegaba por primera vez a la escuela, con nuestros miedos como novatos que éramos en esta nueva carrera, y sin embargo ya se nos ha acabado nuestro año escolar.

Que es lo que siento? Pués por un lado alivio, quieras o no, es cansado hacer los muchos trabajos que nos mandaban, las exposiciones, las clases, los éxamenes... pero por otro tristeza porque de momento esto se acaba, y aunque he tenido experiencias muy malas también he tenido otras muy muy buenas y no se qué será de mí el próximo año....



Para mí la decisión que tomé de matricularme en Magisterio fue un reto muy grande, y aunque aún me quedan los exámenes estoy muy, muy contenta de como me ha ido el año, y veo que he conseguido algo que consideraba una utopía.

Había estudiado Derecho. Estudios que me costaron una barbaridad, lágrimas y sudores de los esfuerzos que realicé.También fue muy duro darme cuenta que aquello no me gustaba y no era mi mundo, no era mi forma de pensar, que me había equivocado en mi decisión. A pesar de ello, yo seguía adelante porque aunque sólo fuese por el orgullo propio de "lo he empezado y ahora lo acabo".

La vida da muchas vueltas y aunque al principio sí trabajé en un despacho(que fue realmente donde reafirmé que la justicia es la cosa más injusta que hay en esta vida), mis siguientes trabajos no tuvieron nada que ver con lo que había estudiado.

Este año, casualidades de la vida, se ha producido un giro radical para mí. Se acababa el trabajo en el que llevaba cinco años, y tomaba la decisión de dejar todo lo mío(casa, familia, amigos, mi mundo...) para lanzarme e irme a una ciudad nueva, a otro mundo totalmente diferente del que me había rodeado hasta ahora. Entonces fue cuando decidí que podía hacer algo que siempre había deseado; estudiar Magisterio. Siempre me habían encantado los niños, disfrutaba con ellos, me sentía felíz con ellos, les hacía felices...

A pesar de las muchas críticas de los que me rodeaban; mira que a tu edad, cómo te vas a poner a hacer eso ahora que ganas de liarte, ..... Tomé mi decisión y me matricule´en Educación Infantil. Quizás tenían razón; llevaba muchos años sin estudiar, podía encontrar trabajo y tener la vida solucionada, el primer año me lo podría pagar pero a partir de ahi... a ver cómo seguía... Pero a pesar de todo ello seguí adelante.
Al principio fue muy duro para mí, todo era diferente, estaba sola en un mundo desconocido, la gente, las cosas, las costumbres, las formas de ser, los sitios, eran muy diferentes a lo que yo estaba acostumbrada, a todo lo que hasta ahora me había rodeado.Y estoy orgullosa de mí misma, he conseguido este año más de lo que he conseguido en mis cinco años de carrera de Derecho; he disfrutado, he conseguido que aunque me costase muchas horas y privaciones obtenía unos resultados muy buenos, he estado haciendo algo que me gustaba, y aunque me costaban las cosas más del doble que al resto de los compañeros, lo iba consiguiendo.



La clase de música aunque todos quizás esperábamos otra cosa, a mí me ha aportado muchas cosas nuevas. Reconozco que me ha costado mucho, mucho tiempo, y le he dedicado muchas horas aunque no lo parezca;

- Abrir un blog , algo que ni siquiera conocía lo que era porque cuando yo estudiaba no existía todo este mundo tecnológico que para mí supone un superesfuerzo. Me ha costado mucho el abrir esta página ir poco a poco a ver como se creaba, y cómo había que hacer las entradas. Y por supuesto, el pensar con mucho cuidado lo que había que escribir porque iba a ser algo público. Sin embargo hoy, mis dedos se han lanzado y no paran de darle a las teclas libremente para escribir todo esto.

-Crear el ritmo de una canción. Puf, y aún esto lo tenemos pendiente... es muy muy difícil cuando no sabes nada de música, no tienes nada de oido, y no sabes crear un ritmo , hacer esta actividad. Le das mil vueltas, a ver cómo se puede hacer, que se puede añadir , que se puede crear...

- La wiki. Otra de mis pesadillas. Sí, si, como lo digo. He perdido muchísimo tiempo pensando en canciones que podía subir, buscando en internet (como ya he dicho no estoy de usar y trabajar con internet, y no se muy bien utilizarlo) la música de cada canción y encontrarla. Porque tenía un montón de canciones, pero otra cosa era encontrar la música y que pudiese subirla. Cada vez que me ponía a ello, no echaba menos de dos o tres horas. Y luego meterme en la wiki, ese mundo también extraño para mí , que cada vez que me metía la armaba. Pero a pesar de todos los problemas que nos ha dado, ahí está y hemos conseguido nuestra wiki.

- Mi danza prima. Cuando me dijo Iñigo enseñarles la Danza Prima me aterró la idea. Yo quería hacerlo bien, y tenía la oportunidad de transmitir a mis compañeros algo de nuestras costumbres asturianas, algo de mi tierrina. Asi que busqué en un montón de sitios, y con un montón de personas cuál podía ser la letra que mejor se entendiese ( ya que hay un montón dependiendo de la zona en la que se cante), y busqué información sobre ella y qué significaba. Y luego, tenía que pensar cómo la iba a enseñar, ya que yo hacía un montón de años que no la bailaba, quizás desde que era chiquita que iba a los bailes regionales. No se si al final el resultado fue bueno y transmití lo que yo quería y lo que se me pedía. Pero por lo menos lo intenté.



Independiente de todo esto, he aprendido cómo enseñar una canción, como corregir los errores de entonación(aunque aún eso me cuesta), cómo respirar para cantar,cómo la música nos va a ayudar muchísimo en nuestra profesión....y otras tantas de las que quizás ahora no nos demos cuenta y que iremos descubriendo en un futuro.
Las clases de música han sido muy productivas para mi formación, e igual que Vanesa, Iñigo también me ha enseñado los muchos recursos y técnicas que tiene un profesor para enseñar, la cualidad de la paciencia tan importante en la enseñanza, su buen humor que nos animaba en las clases, y una forma totalmente diferente de dar clase de cómo las había recibido hasta ahora.
Gracias Iñigo por ser un granito de arena en mi castillo que es mi carrera profesional.